El Camino Más Largo es el Más Corto

HaShem sabe lo que hace. Todos prefieren siempre el camino más corto, conseguir las cosas de inmediato, tener éxito en poco tiempo, salir de los problemas…

HaShem sabe lo que hace. Todos prefieren siempre el camino más corto, conseguir las cosas de inmediato, tener éxito en poco tiempo, salir de los problemas… Aún, el Creador ve y sabe todo; Él sabe que el camino más largo es el único que existe.

La persona que se encuentra en dificultades reza y piensa que todo se solucionará de inmediato. Sin embargo, muchas veces la salvación personal llega como llegó la salvación en Egipto: apenas se empieza a rezar todo se vuelve más difícil… Entonces la persona se ve atrapada por la confusión, le surgen dudas y cuestionamientos…

Estas dificultades son la prueba que el Creador le coloca a la persona para ver si su fe es verdadera, si realmente cree que Di-s escucha sus plegarias y que la salvará de todas sus penurias. Si la persona viera los resultados de sus rezos de forma inmediata no habría ninguna prueba para su fe.

El esfuerzo por conseguir la fe es posible sólo gracias a que los pedidos no son respondidos de inmediato. La persona debe saber y creer que si rezó, HaShem lo escuchó y que sus palabras surtieron efecto. Debe saber que sus rezos finalmente darán frutos… tanto sin puede verlos como si no los ve.

Todavía más, incluso cuando ve que ocurre exactamente lo contrario a lo que pidió en sus rezos y que la situación empeoró, debe reforzar su fe y decirse: Yo no tengo la capacidad para poder entenderlo, HaShem sabe lo que hace. Yo tengo que seguir rezando como lo hice hasta ahora".

Esto lo aprendemos de la primera redención y la persona debe acostumbrarse a esta realidad: que cuando uno comienza a rezar pidiendo alguna cosa la situación se tornará más difícil delo que era antes.

Regalos importantes

Rabí Najman de Breslev explica por qué es así. Cada cosa que pedimos en nuestros rezos podemos recibirla después de pedirla cierta cantidad de veces. Cada cosa debe ser deseada con la intensidad necesaria para poder conseguirla. Cuando el Creador del mundo ve que la persona pidió cierta cantidad de veces y está por abandonar sus rezos, entonces le pone dificultades en el camino para que comprenda que todavía tiene que seguir rezando mucho más.

Por ejemplo: una persona que reza pidiendo liberarse de su enojo cierta cantidad de veces pero su enojo sólo va en aumento… Esta persona se pregunta a sí misma: ¿qué es lo que está pasando? ¡Recé para liberarme del enojo y estoy más enojado que nunca! Pero en realidad es HaShem quien la lleva a esa situación porque para que pueda liberarse del enojo es necesario rezar mucho. Por eso Di-s le muestra la gravedad del enojo para que pueda entender cuánto tiene que seguir rezando, cuánto tiene que suplicar a Di-s para que le permita alejarse de esta mala cualidad. Más cantidad de rezos y con mayor intención y concentración de la que tuvo hasta ese momento.

Porque la persona piensa que es sólo un "enojón" común y que sus rezos están al nivel de su enojo. Pero al ver que su enojo llega a niveles que nunca imaginó, comprende que debe enfrentar a su enojo de una manera mucho más profunda; rezando desde lo más profundo de su corazón una y otra vez, sin pausa. Ahora puede ver claramente la situación desastrosa en la cual se encuentra y entiende que debe prepararse para rezar como es debido. De la misma manera, la persona debe comprender que no recibirá regalos importantes como una fe firme e íntegra o una vida de jardín del Edén con unos pocos rezos…

Este concepto de ser paciente y perseverante está íntimamente ligado con lo que escribimos en el libro "Bisdei Iaar" respecto a que la persona necesita rezar sobre una cosa específica durante media hora cada día. Allí escribimos que quien adopte esta costumbre verá claramente los resultados. Esto es totalmente cierto, pero no significa que no tendrá pruebas en el camino, como dificultades para rezar o que las cosas parezcan ponerse todavía peor que antes…

Por eso debemos saber de antemano que es necesario armarse de mucha paciencia para poder superar las dificultades y seguir rezando. Éste es el aprendizaje que debemos tomar de la primera redención, cuando fuimos salvados de Egipto. Es necesario reforzarse y seguir rezando hasta ver finalmente los resultados. Porque así como en la naturaleza existe la "ley de conservación de la energía", salvando las diferencias entre lo santo y lo profano, también existe en la realidad espiritual una "Ley de la conservación de los rezos", y ningún rezo se pierde sino que se van sumando y quedan guardados. Esto construye un gran edificio espiritual que se va completando con cada rezo que se va agregando hasta que se llega a estar pronto para recibir la salvación y la abundancia.