Cómo Combatir la Mala Inclinación

La principal Mala Inclinación del hombre consiste en confundirle el orden de las cosas, haciéndole pensar en su elección después de ejecutar su acción. El resultado es...

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 06.04.21

La principal Mala Inclinación del hombre consiste en confundirle el orden de las cosas, haciéndole pensar en su elección después de ejecutar su acción. El resultado es

La Auto-Corrección del Hombre, Segunda Parte:
 
Conoce Tu Mala Inclinación
 
Cuando el hombre acepta que posee la Mala Inclinación, debe conocerla y saber cómo combatirla. La esencia de la Mala Inclinación consiste en provocar en el hombre la herejía para que pierda su fe, y esa es en realidad la única forma por la cual puede someterlo con gran facilidad. Por otro lado, mientras el hombre se aferra fuertemente a la fe, tiene todas las herramientas para salvarse de la Mala Inclinación. Prácticamente hablando, un hombre que verdaderamente posee la fe – no posee la Mala Inclinación.
 
¿Cómo actúa la Mala Inclinación? En algunos induce a la herejía de negación del Creador; en otros a la herejía hacia los Preceptos Divinos y les hace pensar que saben por sí solos lo que está prohibido y lo que les está permitido. A algunos les hace aceptar ciertos Preceptos y rechazar otros que parecen demasiado difíciles de cumplir. En algunos introduce malos deseos y apetitos. En otros induce a la pereza, a la rebelión, o a la hostilidad contra los Justos, etc. Es lo que utiliza la Mala Inclinación para hacer caer al hombre en la herejía.
 
El hombre que ya ha merecido dominar todas estas malas inclinaciones, posee completa fe en el Creador y en sus Preceptos y su única intención es cumplir la voluntad Divina. En ese caso, ¿cuál sería su Mala Inclinación?, ¿qué herejía puede infundirle?
 
Respuesta: ¡la Mala Inclinación le puede infundir la herejía del orgullo, o sea la de la auto-culpabilidad!
 
Ahora, explicaremos cómo dominar esta Mala Inclinación.
 
Hay una regla: el hombre posee el libre albedrío y está en sus manos la elección entre el bien y el mal, simplemente si quiere – actúa, y si no – no.
 
Sin embargo, este libre albedrío se ejercita solamente antes de la acción, cuando debe utilizar todo lo que está en su poder y usar los recursos que el Creador le dio para escoger correctamente: él debe armarse ante todo de la poderosa voluntad de escoger el bien, con la creencia que nada impide al Creador darle la fuerza de elegir correctamente. Debe también aprender a reforzar su capacidad intelectual, buscando en los libros consejos y apoyo. Debe pedir consejo a los Justos, y rogar y suplicar al Creador que le ayude a escoger como es debido.
 
¡Pero después de la acción, queda sólo la fe! Un instante después de la ejecución de una acción, sea buena o mala, el hombre debe saber que después de todo, realizó esta elección sólo porque el Creador lo quiso. Porque "No hay más nada fuera de Él" y sólo el Creador es el que ejecutó, ejecuta y ejecutará todas las acciones. Resulta, que cuando el hombre escoge el bien, no tiene ninguna razón para enorgullecerse porque sabe que todo proviene de la fuerza del Creador que quiso que tuviera éxito. También lo contrario es verdad, el hombre que fracasa debe saber que esto proviene del Creador que quiso que tropezara, porque si hubiera querido que tuviera éxito, Él le habría dado la fuerza para lograrlo.
 
La principal Mala Inclinación del hombre consiste en confundirle el orden de las cosas, haciéndole pensar en su elección después de ejecutar su acción. El resultado es el siguiente: si el hombre tuvo éxito en su elección, la Mala Inclinación le infunde el orgullo según el principio de "Con mi propia fuerza y el poder de mi mano", haciendo depender su éxito de su buena elección. Si él fracasa, la Mala Inclinación le infunde la auto-culpabilidad, se acusa de haber escogido mal y se sumerge en la tristeza. Así es como la Mala Inclinación inspira en el hombre la incredulidad, porque el libre albedrío no es relevante sobre el pasado. Después de la acción, queda sólo la creencia que esa fue la voluntad del Creador. Concretamente, esta fe es todavía una elección, ya que expresa la elección del hombre después de la acción, de creer que así el Creador lo quiso.
 
En conclusión: antes de la acción, la elección consiste simplemente en escoger el bien y en cumplir la Voluntad Divina. Después de la acción, la elección consiste en creer que el Creador quiso lo que elegiste hacer y que "Todo es para bien".
 
(Extraído del libro "En el Jardín de la Fe" por R.S. Arush)

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1. Michele Rocco

5/15/2022

Gracias a la emuna acepte ciertas decisiones que tomé y que me llevaron a perder mucho dinero empero si yo hubiese tenido ese dinero no habría tenido emuna el más grande regalo que el Eterno le obsequia a una persona, gracias Hashem , bendito y alabado seas Padre celestial que continuamente pro ves el bien a todas tus creaturas

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