Siempre en la Búsqueda

Cada persona judía tiene una neshamá, un alma pura. ¿De qué vivimos? ¿De pilas de larga vida? Nuestra vida es un regalo Divino que nos dio HaShem, que nos dio a cada uno una neshamá y el poder de pensar. Cada uno de nosotros tiene un rol que cumplir en esta vida. No se nos dio la vida para que andemos dando vuelta sin ningún objetivo. HaShem hizo este mundo para que hubiera en él un Abraham, un Isaac y un Jacob y un Pueblo de Israel. Cada uno de nosotros tiene parte en esto. ¡Afortunados de nosotros! El mundo que nos rodea solamente sabe matarse los unos a los otros, buscar placeres físicos etc… pero nosotros tenemos nuestro legado especial, la sagrada sabiduría. Tenemos una misión que cumplir en este mundo.

Tenemos que volver a acercarnos a HaShem, a deleitarnos en Él sin olvidar nunca cuánto Él se deleitarse en nosotros. El alma judía sabe eso. Y por mucho que se lo quieran hacer olvidar, no va a servir, porque él siempre va a a volver. Es por eso que los judíos siempre se están moviendo, nunca están en paz. El alma siempre está buscando. Los judíos todo el tiempo discuten, señal de que quieren alcanzar algo. Todos queremos lo mismo, pero en este mundo, es difícil conseguirlo. Todos pasamos por esto.

Todos queremos tener el Jardín del Edén todos los días. Hoy en día todo el mundo vive en un Jardín del Edén. En una época, ¿quién pensaba en comer helados? Eso era solamente para los reyes. Pero hoy en día tenemos todos los placeres que se te ocurran. Y sin embargo, una cuarta parte de la población tiene necesidad de ir al psiquiatra y la mayoría de los remedios que se fabrican son antidepresivos y calmantes. Pero la verdad es que para curar el alma judía hay que darle de probar la dulzura de la Emuná. Veamos todo lo bueno que tenemos. Es fácil hacer el bien.

¿Cómo podemos fortalecernos? Para esto tenemos al Rebe y a Uman. A veces caemos en la trampa de la confusión y la amargura y toda la basura de este mundo. El alma pasa por cosas terribles y si no nos fortalecemos, podemos caer en la desesperación y vivir llenos de preocupación y celos.

Esto es lo que aprendemos aquí, que está el Rebe y que hay tzadikim que quieren mostrarnos el camino, el camino para que cada uno de nosotros retorne a HaShem y vuelva a tener todo ese deleite. Incluso la persona que está en la cárcel, hay un solo consejo – anularte ante HaShem. Olvídate de lo que “sabes”. Dices que sabes, pero en realidad no sabes nada. Cuando la persona se levanta de noche y Le habla a HaShem con toda su verdad, puede salir de la cárcel y retornar a la vida real. “HaShem sí me necesita”. Eres judío, y puedes lograr un montón de cosas. Empieza a hacer teshuvá y fortalécete!

¿Cómo es posible que el pueblo judío haya sobrevivido tanto tiempo, con todas las naciones que quisieron eliminarnos? El Zohar Sagrado dice que hay grandes acusaciones contra nosotros allá Arriba, y que los Tzadikim salen en nuestra defensa, pero que igualmente el Lado del mal sigue siendo muy fuerte. Y entonces llegan los Tzadikim más grandes y traen misericordia al Pueblo de Israel, a cada individuo, para mostrarles cómo sentir la Emuná y cómo acercarse a HaShem, a levantarse del suelo. Esos tzadikim arrojan una sola flecha y la serpiente ya está muerta.

Si todos los que hacen teshuvá también se acercaran a la luz del Baal ShemTov y de los tzadikim, entonces verdaderamente estarían vivos y con un verdadero sentido de la vida. Porque entonces la persona sabe que HaShem la envió aquí con un propósito. ¡Esa es la verdadera alegría!

¿Todavía estás buscando? Prueba la Sabiduría de Rabí Najman de Breslev, y trae genuina alegría a tu vida!