Los Funcionarios

¡Acuérdate! Tú eres sólo como la mano larga del Creador. Puedes elegir ser una mano acariciante o una mano que golpea; ser Su respaldo o Su vara...

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 06.04.21

¡Acuérdate! Tú eres sólo como la mano larga del Creador. Puedes elegir ser una mano acariciante o una mano que golpea; ser Su respaldo o Su vara…

 
Los funcionarios
 
Todo tipo de autoridades, como policías, jueces, maestros, oficiales del ejército, jefes, y todo tipo de responsables y conductores, deben saber que están viviendo una prueba muy grande. Si lograran aprobarla – podrán lograr grandes niveles espirituales y una gran recompensa, cumplirán su misión, e incluso llegarán a corregir todo su pasado y encarnaciones anteriores. Pero si no la aprobaran – tendrán grandes daños y muchísimos pecados, cuya expiación es muy difícil.
 
Y esto por tres razones principales:
 
a) Un hombre que no posee un cargo público, tiene generalmente contacto sólo con una limitada cantidad de gente, principalmente con su familia, sus colegas de trabajo o de estudio. Por lo tanto, él no puede dañar sino a un limitado número de personas. Pero el que posee un cargo que le hace tener  contacto  con  muchísima  gente  cuyas  vidas  están influenciadas directamente por sus decisiones y su comportamiento, por un lado, si lograra cumplir su cargo con fe, tendrá el mérito de ayudar a mucha gente, será bendecido en todas las áreas de su vida, y tendrá una recompensa en el Mundo Venidero. Pero por otro lado, si no aprendiera a utilizar el dominio que tiene en sus manos con fe, afligirá a la gente que está bajo su responsabilidad, y hará muchas transgresiones de “Entre una persona y otra”. Y como ya fue mencionado, eso es muy difícil de corregir, porque deberá encontrarlos a todos y conciliarse con cada una de las personas a las cuales ofendió, lo que es casi imposible de hacer. Encontramos entonces, que este hombre se prepara con sus propias manos grandes problemas, así que no deberá asombrarse si recibe golpes de todos lados y su vida se transforma en una pesadilla.
 
b) Un hombre que tiene un cargo responsable posee una gran obligación sobre sus hombros, puesto que el éxito de la vida de los que están bajo su responsabilidad depende en gran medida de su comportamiento. Por ejemplo: la conducta de un maestro con su alumno influye a lo largo de toda su vida, para bien o para mal; un funcionario de un ministerio puede con una breve decisión ayudar u obstaculizar; el veredicto de un juez puede determinar la vida o la muerte; un policía puede dañar sin razón o salvar vidas, etc.
 
c) Un hombre con cargo de responsabilidad debe corregir los rasgos de su carácter mucho más que un hombre común, porque tiene muchas y más variadas pruebas, que sin buenas cualidades no podrá superar. En cada momento tiene este hombre el libre albedrío de beneficiar a la gente o causarle mal, conducirse con misericordia o con crueldad; dar beneficios o impedirlos; dar una condena grave o leve, e incluso perdonar el  castigo  completamente. También  tiene  la  elección  de conducirse con cortesía y respeto con quien está frente a él, o por el contrario, despreciarlo, ignorarlo o avergonzarlo. Por eso, este hombre debe, más que cualquier otro, conducirse con temor al Creador, buscar siempre cuál es Su Voluntad en cada decisión suya, y tener presente que el Creador lo juzgará por cada cosa que decida.
 
Ésta es la regla: cuando el hombre tiene un cargo de autoridad, debe verlo como una misión Divina en la cual él es sólo un emisario del Creador. Por consiguiente, debe hacer el bien a la gente, y con eso cumple su rol. Pero si se enorgullece por su cargo y piensa que él es el dueño de los que están bajo su responsabilidad, fracasará y será castigado por eso.
 
¡Acuérdate! Tú eres sólo como la mano larga del Creador. Puedes elegir ser una mano acariciante o una mano que golpea; ser Su respaldo o Su vara. Y debido a que el Creador causa un mal acto mediante un deudor y un buen acto mediante una persona recta, entonces debes saber que cuando afliges a alguien, es señal que eres un deudor y fuiste elegido para ser la vara. Y cuando beneficias a alguien, es señal de que eres justo y fuiste elegido para ser el respaldo.
 
Por lo tanto, el hombre poseedor de un cargo público, más que cualquier otro, no debe dejar pasar ni un día sin tener una hora entera de examen de conciencia frente al Creador, en la cual se arrepentirá, y entonces siempre será recto y será elegido para ser el respaldo de los demás.
 
Este hombre debe hacer todo lo que está en su poder para cumplir su cargo en forma positiva. No será cruel, no ignorará las emociones de la gente y no despreciará a nadie. Por el contrario, debe aprovechar el mando que recibió sobre las personas para ayudarles y beneficiarlos. Y cuando necesita, en ejercicio de su cargo, corregirlas e incluso castigarlas, debe hacerlo con gran misericordia y explicarles sus consideraciones educativas, y con eso los apaciguará.
 
¡Debemos saber! Según las Leyes del Creador, el hecho de poseer un cargo no nos da el derecho de cometer transgresiones de “Entre una persona y otra”. Si un hombre en el mundo se afligiera gratuitamente por nosotros, entonces incluso si nos arrepintiéramos y pidiéramos al Creador miles de disculpas, todo el tiempo que no nos reconciliemos con el hombre que afligimos, habrá una gran acusación sobre nosotros en el Cielo.
 
Contrariamente, si beneficiáramos a alguien y le ayudáramos a mejorar sus acciones, entonces nuestra recompensa será infinita, porque esto influirá sobre todas las futuras generaciones de esa persona durante toda la eternidad. Debemos recordar muy bien la siguiente regla de los Sabios – “Hay encima de ti un Ojo que ve, un Oído que oye, y todos tus actos están inscriptos en Su Libro”.
 
 
Continuará…
 

(Extraído del libro "En el Jardín de la Fe" por Rabi Shalom Arush, Director de las Instituciones "Jut shel Jésed" – "Hilo de Bondad")

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