Parashat Nitzavim – Vaielej

Parashat Nitzavim

(Devarim: 29: 9-30: 20)

La parashá Nitzavim incluye algunos de los principios más fundamentales de la fe judía:

La unidad de Israel: "Estáis hoy todos delante de Hashem vuestro Dios: vuestros jefes, vuestras tribus, vuestros ancianos, vuestros funcionarios y cada israelita; vuestros jóvenes, vuestras mujeres, el forastero en vuestra puerta; desde tu leñador hasta tu aguatero".

La redención futura: Moshé (Moisés) advierte del exilio y la desolación de la Tierra que resultará si Israel abandona las leyes de Dios, pero luego profetiza que, al final, "Volverás al Señor tu Dios … Si tus desterrados llegarán a los confines de los cielos, de allí Hashem tu Dios los recogerá … y te llevará a la tierra que poseyeron tus antepasados".

La practicidad de la Torá: "La mitzvá que te ordeno este día, no está más allá de ti ni está lejos de ti. No está en el cielo … No está al otro lado del mar … Más bien, está muy cerca de ti, en tu boca, en tu corazón, para que puedas hacerla ".

Libertad de elección: "He puesto delante de ti la vida y el bien, y la muerte y el mal; en que te mando hoy que ames a Dios, que vayas por Sus caminos y guardes Sus mandamientos … La vida y la muerte he puesto ante Ti, la bendición y la maldición. Y elegirás la vida ".

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Parshat Vaielej

(Devarim 31: 1-30)

La parashá de Vaielej ("Y fue") relata los eventos del último día de la vida terrenal de Moshé (Moisés). "Tengo ciento veinte años hoy", le dice al pueblo, "y ya no puedo salir y entrar". Moshé le transfiere el liderazgo a Yehoshua (Joshua) y escribe (o concluye escribiendo) la Torá en un rollo que les encarga a los levitas para que lo guarden en el Arca de la Alianza.

Se da la mitzvá de Hakhel ("Reunir"): cada siete años, durante la fiesta de Sucot del primer año del ciclo de shemitá, todo el pueblo de Israel, hombres, mujeres y niños, debe reunirse en el Templo sagrado en Jerusalén, donde el rey les leerá la Torá.

Vaielej concluye con la predicción de que el pueblo de Israel se apartará de su pacto con Dios y hará que Él oculte Su rostro de ellos, pero también con la promesa de que las palabras de la Torá "no serán olvidadas de la boca de sus descendientes".

(Usado con permiso de chabad.org)