¡Usted no me devolvió el dinero!

Me contó un conocido que también es rabino y director de una casa de estudios rabínicos que tenía un problema muy grande. Tenía una deuda con alguien y le devolvió el dinero, pero el acreedor no rompió el cheque de garantía. Y después de muchos años, ¡el acreedor de pronto le presenta una demanda por diez mil dólares! El pobre me llamó muy triste, completamente destrozado, y me dice: “¡Pero yo ya le pagué! ¡Y él no me devolvió el cheque y ahora me demanda por una deuda que yo ya no tengo, con intereses y todo!”. Yo le dije así: “Vete a la playa, a la orilla del mar, y dale las gracias a Hashem durante una hora entera. Pero solamente gracias, ¡no pidas nada! ¿Hashem quiere que pagues diez mil dólares? Lo que hace Hashem es bueno. ¡Dale las gracias!”.

El rabino fue a la playa a hacer hitbodedut y Le dio las gracias a Hashem una hora entera. En vez de ponerse a llorar por la aflicción que le sobrevino, él se fortaleció y dijo: “Amo del universo, a pesar de que yo no le debo nada, si Tú quieres que yo le pague diez mil dólares, no hay ningún problema. ¡Gracias! Todo lo que haces es para bien. Yo no entiendo los cálculos Divinos. Es posible que le deba esa suma de alguna reencarnación anterior o algo similar. Lo que es seguro es que lo que Tú haces es lo mejor para mí. Muchas gracias, Dios mío, Amo del universo. ¡Yo sé que todo lo que sucede es Tu obra! Él no es más que una marioneta; él no decide nada; ¡él es solamente una vara en Tus manos! ¡Él no es nada! ¡Bendito sea Tu Nombre! Te doy las gracias, Dios mío, ¡Tú sabes perfectamente lo que haces!”. Y así continuó agradeciendo y alabando a Hashem.

A la mañana siguiente, el acreedor que le había presentado demanda lo llamó por teléfono y le dijo que había tenido un sueño y le dijo que quería devolverle el cheque. La demanda fue anulada y el cheque fue devuelto.

Él dio las gracias una hora – ¡y le llegó la salvación!

Todos debemos aprender de esta historia verídica hasta qué punto debemos aferrarnos a la emuná. Si entendiéramos todo lo que Hashem hace con nosotros, entonces ¿cuál sería el desafío? Cuando la persona entiende, estamos hablando de conocimiento, no de emuná. Cuando uno sabe, entonces ya no tiene libre albedrío. Y entonces ¿por qué Hashem lo va a recompensar? La emuná implica que uno cree incluso cuando no entiende nada, cuando todo está a oscuras; cuando uno está en el exilio; cuando todo parece negro. Si en medio de toda esa oscuridad uno cree que no existe el mal; si uno ve el mal y cree que es algo bueno, eso es emuná. Esa es nuestra elección en este mundo: creer o no creer. Al que cree, le va bien en todo y tiene éxito, canta, baila y alaba al Creador. Y el que no cree que todo es para bien, entonces cada vez que algo no sale como quisiera, enseguida se deprime, se lamenta y no deja de quejarse y, como consecuencia, se aleja de la emuná y del objetivo de su vida.

Hoy en día podemos traer la Redención fácilmente por medio de la gratitud. Está escrito que cuando llegue la Redención, aumentará la conciencia espiritual: “Porque la tierra se cubrirá del conocimiento de Hashem igual que las aguas cubren el mar”, o sea que todos sabrán que Hashem es Bueno y que no existe ningún mal en el mundo. Por lo tanto, en este camino de la gratitud que estamos aprendiendo a transitar, a través del cual todos pueden conocer al Santo Bendito Sea, estamos trayendo la Redención, ya que la esencia de la Redención es la gratitud, tal como explica Rabí Najman en la lección de la gratitud, la lección 2 del Likutey Moharán Segunda Parte: “El principal deleite del Mundo Venidero es agradecer y alabar Su Gran Nombre Bendito Sea y conocerlo, y de ese modo nos acercamos y nos aferramos a Él”.

Escribe Rabí Najman (Likutey Moharán Primera Parte 21): “Todos los problemas y todo el sufrimiento y el exilio son proporcionales a la falta de conciencia espiritual”. ¿Por qué la persona sufre? Porque no tiene conciencia espiritual. No tiene emuná. ¿Por qué la persona está en el exilio? Por el mismo motivo: porque no tiene conciencia espiritual. Y cuando se completa la conciencia espiritual, se suplen todas las carencias, como el concepto de (Nedarim 41): “Si adquiriste conciencia espiritual, no te falta nada”. Y está escrito: “Por eso Mi pueblo fue exiliado sin conciencia espiritual” – ¿por qué Israel se encuentra en el exilio? “Y la esencia de la vida eterna será en el futuro a causa de la conciencia espiritual, porque aumentará la conciencia espiritual, porque todos conocerán a Hashem”. ¿Por qué entonces habrá vida eterna? Porque todos conocerán a Hashem. Y a través de la conciencia espiritual serán incluidos en Su Unidad y entonces vivirán una vida eterna, igual que Él. Hashem es Infinito. Su vida es infinita. Por lo tanto todo el que queda incluido en Hashem ha de vivir una vida eterna. Y serán incluidos en Él al conocerlo, ya que a través del conocimiento uno queda incluido en Él, tal como dice el Sabio: “Si Lo conociera, entonces sería Él”. Y el conocimiento será principalmente en el futuro, tal como está escrito: “La tierra estará cubierta de conciencia espiritual” y gracias a la conciencia espiritual no faltará todo lo bueno y todo será bueno, tal como hemos citado de nuestros Sabios (Pesajim 50b): (Está escrito: “Aquel día Hashem será Uno y Su Nombre será Uno”. Y nuestros Sabios preguntan: “¿Acaso ahora Él no es Uno?”). Y respondieron: “en el futuro Él será sólo Bueno y Benefactor”. Ahora no todos viven la realidad de que Hashem es Uno y que es solamente Bueno y Benefactor.

En el futuro, cuando todos aprendan a dar las gracias por lo bueno y por lo malo – entonces Hashem tendrá un solo Nombre. Hashem será puramente “el Bueno y el Benefactor”. La gente ya no va a decir: “el Juez de la Verdad”, sino que únicamente darán las gracias, y entonces Hashem será Uno y entonces se revelará la conciencia espiritual, y entonces los seres humanos sabrán que todo lo que sucedió era bueno y que jamás existió el mal y que nunca hubo carencias y entonces no habrá más exilio.