Hoy Mismo – Ki Tavó

Sea una tragedia o una alegría... ¿Cúantas veces la inspiración que tenemos en ese preciso momento se desvanece a través del tiempo?…

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Rabino Mordejai Kamenetzky

Posteado en 05.04.21

Sea una tragedia o una alegría… ¿Cúantas veces la inspiración que tenemos en ese preciso momento se desvanece a través del tiempo?                        

 
Hoy mismo
 
"Hoy mismo!"… Que palabras poderosas! La usan los doctores cuando determinan el momento exacto que sus pacientes deben dejar de fumar; también es la palabra favorita de los cobradores cuando intiman a sus deudores a liquidar los saldos pendientes. Y también por la Torá para describir lo que quiere de nuestras actitudes.
 
La Parashá de esta semana nos dice: (Deuteronomio 26:16): "Hoy HaShem ordena que cumplan estos decretos y estatutos". Este  versículo tiene obviamente una connotación más profunda. Los mandamientos no fueron dados el día que Moshe lee esta porción, sino que fueron dados cuarenta años antes.
 
Rashi para explicar este versículo cita al Midrash Tanjumá que dice: "Cada día la Torá debería ser ante nuestros ojos como si hoy mismo fuera dada". Es decir cuarenta años más tarde, Moshe dijo al pueblo que hoy HaShem nos ordenó que observemos la Torá. Con esa hermosa interpretación del concepto del "hoy," en mente, me gustaría compartir una reflexión sobre el final de la porción de esta semana.
 
Moshe llama a la nación, los reúne y les recuerda los milagros que ocurrieron durante el éxodo de Egipto. Moshe habla sobre "las grandes maravillas, signos y milagros que vuestros ojos contemplaron" (Deuteronomio 29:1-3). Luego Moshe añade algo difícil de entender: "Pero HaShem no les dio un corazón para entender u ojos para ver hasta el día de hoy".
 
¿Qué significa esto? Acaso no tuvo la nación judía un corazón como para apreciar la milagrosa apertura del Mar Rojo cuarenta años atrás? ¿O del milagro del Mana durante las primeras décadas en el desierto? ¿Cómo Moshe puede decir que no tuvieron ojos ni corazón como para entender hasta el día de hoy?
 
El Rav Jaim Shmulevitz una vez dio un maravilloso e inspirador discurso en el cual contó la historia de tres amigos que estaban comiendo en una mesa y discutiendo las refinadas cualidades de los sabios del Talmud. Al oír acerca de uno de los notables logros de un Gaon de la epoca a través de su constancia en el estudio de la Torá, uno de los muchachos sentados en la mesa corrió directamente al Beit Medrash (la Sala de estudios) donde, inspirado por estas historias de los sabios del pasado, empezó una maratón de estudio. Durante un año entero, el joven se rehusó a hablar de cualquier cosa excepto Torá. Con el tiempo, este muchacho se convirtió en uno de los líderes de su generación.
 
Después de esta elocuente historia, uno de los alumnos del Rab Shmuelevitz le preguntó, "La verdad es que la historia es asombrosa. ¡Pero el joven que corrió de la mesa se olvidó de recitar la bendición después de las comidas!".
 
El Rab Chaim sonrió ante esta pregunta, inclinó la cabeza y le respondio: "Tienes razón. Él no recito el Birkat Hamazon (rezo después de la comida).
 
Pero si él se hubiera detenido y preparado para recitar estas oraciones después de esa inspiradora comida, quizás nunca habría regresado al Bet Midrash con el mismo ímpetu y entusiasmo".
 
Quizá Moshe le cuenta a su pueblo el secreto para estar inspirado eternamente. Uno puede experimentar acontecimientos milagrosos, incluso tener un flash inspirador de tremenda claridad. De todos modos, podemos no tener "corazón para entender u ojos para ver" hasta que esa visión se repita… hoy mismo! A menos que la inspiración se viva a diario, tal como lo hizo en el momento que genero el impacto inicial.
 
Sea una tragedia o una alegría… ¿Cúantas veces la inspiración que tenemos en ese preciso momento se desvanece a través del tiempo? Las promesas y compromisos que en esos momentos llegamos a contraer comienzan lentamente a quedar en el olvido mientras la inspiración que teníamos desaparece.
 
Esta semana Moshe nos dice que aun después de haber experimentado los mas maravillosos y memorables milagros, "no tenemos el corazón para discernir ni ojos para ver" hasta que añadamos un ingrediente esencial. El tenerlo presente como si lo hubiéramos vivido hoy mismo.
 
¡Shabát Shalom!
 
 
– Dedicado por Gisele e Ira Beer en memoria de Gisa Meyers –
 
 (Gentileza de www.tora.org.ar)

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1. Carmen Hernández García

9/23/2019

Hoy mismo Hashem me tiene en una prueba, en la cual entiendo qué quiere que hoy mismo no olvide el estar cerca de él, quiere que hoy mismo retome mi vida de oración y acercamiento hacia él, quiero pedir oraciones en mi ayuda y que me de voluntad y fuerzas espirituales para seguir en éste campo de batalla. Gracias comunidad de breslev por fomentar la emuna en el mundo entero.

2. Jana

9/20/2019

Excelente resumen, muy cierto muchas veces cerramos los ojos y el corazón a las enseñanzas que nos muestra Hashem hoy, y los mandatos de Hashem no tienen fecha de caducidad

3. Larisa

9/19/2019

Cuánta enseñanza!!!

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