Emor: El Shabat de la Historia

Shabat. Qué día tan especial para todos aquellos que han saboreado su dulzura.

4 Tiempo de lectura

Rabino David Charlop

Posteado en 26.04.21

Shabat. Qué día tan especial para todos aquellos que han saboreado su dulzura. Las inspiradoras plegarias, la comida tan deliciosa, la sensación de calma y cercanía a Hashem – todos estos son los ingredientes que conforman este maravilloso día. Pero además de los placeres propios de este gran día, el Shabat posee un gran significado espiritual, ya que refleja algunos de los principios más básicos del judaísmo. Descansar en el séptimo día significa que hay un Creador y Proveedor que hizo el mundo en seis días y descansó al séptimo. Si bien estas ideas son básicas, hacen falta hacer algunas aclaraciones. ¿Qué es eso de que el Creador “descansó”? Obviamente no estaba "cansado" después de crear el mundo – ¿qué significa esto y cómo se relaciona con nuestra conexión con el Shabat?

 

Antes de intentar responder a esta pregunta, quiero hacer una segunda pregunta, que es más bien una "trampa". En la Torá, ¿cuándo el Shabat no es Shabat? Respuesta: en la lectura de la Torá de esta semana. A partir del segundo día de Pesaj y hasta Shavuot (el día en que se entregó la Torá en el Monte Sinaí) se nos ordena contar 49 días como preparación para recibir la Torá. La Torá nos dice que debemos empezar a contar estas siete semanas "desde el día después de Shabat". La Ley Oral deja muy claro que el uso del término Shabat es en realidad una referencia a Pesaj y que debemos empezar a contar el día después del primer día de Pesaj. Ahora bien: ¿por qué Pesaj se denomina en este caso “Shabat”? ¿Qué significado tiene el nombre "Shabat" para referirse también a Pesaj?

 

Me gustaría responder con una parábola basada en las palabras del santo Rabí Levi Itzjak de Berditchev (1740-1809):

Un hombre construye un edificio para la Yeshivá invirtiendo mucho dinero y mucho esfuerzo. En un momento dado, el hombre termina la construcción. Es un día de gran celebración, ya que ha alcanzado su objetivo. Sin embargo, la verdadera celebración recién tiene lugar cuando empieza el primer día de estudios, cuando las salas de estudio se llenan de sonidos de estudiantes ansiosos por estudiar. En realidad, por muy significativa que sea la finalización del edificio, el uso del mismo como lugar de crecimiento y progreso espiritual es la principal razón por la que se construyó el edificio en primer lugar.

 

Hashem creó el mundo en seis días. En el séptimo día, Él descansó y a través de ese descanso, nos enseñó que todos los componentes del mundo estaban en su lugar. Esto en sí mismo era y es un motivo de celebración, que hacemos cada semana en Shabat. Sin embargo, ¿quién iba a saber valorar y utilizar adecuadamente el "edificio" que llamamos "este mundo"? En Pesaj, el pueblo judío fue liberado y se dedicó a vivir de acuerdo con el diseño del Creador. Con el Éxodo, el alumnado se hace presente revelando el segundo y más profundo propósito de la Creación.

 

Basándose en las ideas de Rabí Levi Itzjak, el Shabat no es sólo un tiempo de descanso, sino que es un momento en el que el propósito del mundo se pone de manifiesto. El Shabat de la Creación se relaciona con la finalización del mundo físico, mientras que el "Shabat" del Éxodo expresa el nacimiento de esa nación que reflejaría el propósito de Hashem en este mundo. Según esto, el Shabat no es sólo un momento de cese del trabajo, sino un momento en el que la vida se sitúa en su verdadera perspectiva. Es un momento en el que se nos pide que nos centremos en lo que es verdaderamente importante en este mundo. Por eso, Pesaj se llama en este caso “Shabat”.

 

Partiendo de la idea de que Pésaj representa un momento esencial en el que se reveló el propósito de Hashem en este mundo, ¿por qué la Torá esperó a llamar a Pésaj con el título de Shabat sólo en referencia al recuento de los 49 días entre Pésaj y Shavuot? ¿Por qué no se le dio el título de Shabat a Pesaj en referencia a la festividad en sí y no al período de recuento posterior?

 

Una posible explicación es que los 49 días significan un tiempo en el que el pueblo judío toma los dones y talentos que Hashem le da y trabaja para transformarlos como medios para seguir Su voluntad. Pesaj es el momento en que el pueblo judío es llamado a entrar en el edificio. Se nos dan 49 días para construir el edificio de acuerdo con el plano del Arquitecto. Estamos llamados a emplear cada cualidad que tenemos, por ejemplo, la bondad, el autocontrol, la humildad, etc. como vehículos para conectar con Hashem. En este proceso de transformación personal y colectiva se incluye la incorporación de cada uno de los sucesos de la vida a fin de unirnos a Hashem. El pueblo judío ha pasado por la riqueza y la pobreza, por pogromos y por épocas de tremendo crecimiento y también terribles pérdidas. Con la ayuda de Hashem hemos transformado estos desafíos en bendiciones.

 

Pésaj es el Shabat de la historia en el que el pueblo judío fue llamado a completar la creación mediante el uso de un sinfín de experiencias, talentos y desafíos para reflejar la presencia de Hashem en este mundo. Que tengamos el mérito de tener la claridad y la fortaleza para ayudar en la perfección del mundo y traer ese tiempo de Shabat para toda la humanidad.

 

 

 

Escribe tu opinión!

Gracias por tu respuesta

El comentario será publicado tras su aprobación

Agrega tu comentario