El Amor Todo lo Cura

Con amor y con paciencia, los padres pueden lograr mucho más que con las reprimendas. Y lo que es más, el amor es capaz de curar las más terrilbes enfermedades…

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 05.04.21

Una persona que escucha mis CDs tiene un hijo que entró en un estado emocional muy difícil. El niño empezó a sentir toda clase de miedos, a actuar totalmente desorientado y a perder las ganas de ir al colegio. Cada mañana era una lucha sacarlo de la cama, hacer que se vistiera y se calzara los zapatos; cada paso era una lucha. A las diez de la mañana, todavía no habían logrado que el chico saliera de la casa para ir a la escuela. Esta situación insoportable se repetía todas las mañanas.

Los padres lo llevaron a un psiquiatra, que le prescribió medicamentos que no hicieron más que destruirle la vida. Cada vez estaba más nervioso y más difícil de tratar. Los padres interrumpieron la medicación por propia iniciativa y cambiaron el psiquiatra por un psicólogo, pero eso tampoco les sirvió de nada. Este último trató de ayudarlo basándose en sus propios conocimientos, pero no tuvo éxito. Después de meses trabajando con el niño, era obvio que todo el esfuerzo no había servido de nada: el estado del niño continuaba empeorando.
 

Durante todo este lapso, el padre del niño, que seguía mis enseñanzas, pasaba una hora de plegaria personal diaria rogando por su hijo.

Y así fue como comenzó todo. Cada mañana, a las 6.00, el padre iba a ver al hijo, lo abrazaba y lo besaba, y le decía palabras de cariño, como por ejemplo: “Tú eres mi hijo tan querido, mi luz, ven, yo te voy a ayudar”. Cada mañana, el padre despertaba al hijo, y lo llenaba de afecto, de amor y de palabras cariñosas. Muy pronto, el niño comenzó a levantarse. Pasado un lapso, empezó a levantarse temprano y se curó por completo, gracias a las plegarias del padre, y a su paciencia y su aliento para con su hijo.

Y es que el amor es capaz de curar al hijo hasta de los problemas psicológicos más terribles.

Esta historia verídica es un perfecto ejemplo de lo que es el amor y la devoción de un padre. Porque este padre sacrificó su propia espiritualidad -dejó de participar en los rezos de la mañana de la salida del sol y de sus estudios del Talmud antes de la plegaria- para prodigarle toda su atención a su hijo. Y es muy importante que resaltemos este punto, porque muchas veces los padres se sienten presionados por sus propias circunstancias de vida. Por eso, no deben olvidar que los hijos son la prioridad número uno.

En términos generales, en esta clase de situaciones, la madre no puede ayudar mucho, porque ella está muy ocupada a la mañana con los otros hijos y demás quehaceres, y no tiene la misma capacidad ni la misma paciencia que el padre. Por eso, es el padre el que tiene que sacrificarse por su hijo.

No obstante, cuando me enteré de esta historia, no pude menos que acordarme de mi madre, que en paz descanse, que era una persona excepcional en ese sentido. Es increíble cómo HaShem les da un corazón tan gigante a personas simples como ella, que ni siquiera saben leer o escribir.

Nosotros, cada vez que nos levantábamos a la mañana, ¡ya estaba todo listo! Ya estaban los sándwiches listos para llevar al colegio, y la casa estaba limpia y organizada. No existía que saliéramos al colegio sin antes comer o beber algo. ¡Y las bendiciones que ella nos daba! Nos colmaba de buenos deseos, que nos acompañaban todo el día…. ¡Qué amor, qué cariño! Así era como empezábamos el día. Tenemos que recordar que una atmósfera así les da a los hijos fuerza y una salud emocional excepcionales.

Vemos entonces que el amor cura. Rabí Najman pregunta: “¿Acaso tiene algún mérito denigrar al otro? ¡Lo único que tiene mérito es elevar al otro!”. Cuando vemos que la otra persona tiene un problema -ya sea el hijo, el amigo o el cónyuge- ¿acaso nos abalanzamos sobre él y lo llenamos de reproches? No. Lo ayudamos a que se ponga de pie con amor y con cariño.

Esta forma de encarar las cosas, con amor y con paciencia, resuelve muchos problemas, no solamente el de levantarse a la mañana. A veces yo rezo por un hijo dos semanas enteras antes de encararlo acerca de algún problema que tiene. Espero a que se presente el momento oportuno, para poder hablarle con cariño o contarle alguna historia o estudiar con él algún tema en el que necesite ayuda. ¡Y les puedo asegurar que veo milagros!

Los ejemplos abundan: el niño que no reza bien, por ejemplo. Cuando se me presenta la oportunidad, le cuento una historia acerca del poder de la plegaria, de la virtud de rezar con la debida intención, etc. Y por lo general, después de eso el chico reza sin problemas.
Y es que con amor y con cariño, podemos lograr todo lo que las reprimendas no pueden lograr.
 

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1. Madai

7/05/2021

Violeta Parra ,nuestra cantautora decía en una de sus hermosas canciones " El amor es torbellino de pureza original.Hasta el feroz animal susurra su dulce trino.Detiene a los peregrinos, libera a los prisioneros.El amor con sus esmeros al viejo lo vuelve niño.Y al malo solo el cariño lo vuelve puro y sincero. El amor es el alma de DS

2. Yehudith de Navarro

6/25/2014

“Con amor y verdad se perdona la falta ” Proverbios 16:6 Bellísima esta enseñanza, ha tocado mi corazón profundamente y me ha llevado a hacer ticun con mi hijo; ultimamente lo he criticado mucho y se ha alejado de mi,no lo he tratado con amor ni he perdonado sus faltas con amor sino con dureza. Quiero corregirme antes de corregir.

3. Yehudith de Navarro

6/25/2014

Bellísima esta enseñanza, ha tocado mi corazón profundamente y me ha llevado a hacer ticun con mi hijo; ultimamente lo he criticado mucho y se ha alejado de mi,no lo he tratado con amor ni he perdonado sus faltas con amor sino con dureza. Quiero corregirme antes de corregir.

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